¿Qué es Cloud Computing y cómo funciona?

La computación en la nube (del inglés cloud computing) es una informática basada en Internet en la que los datos y recursos no se almacenan de forma local en un disco duro o en un servidor dedicado conectado a la red (NAS), sino a través de la Web, y se comparten a pedido para dispositivos como ordenadores, teléfonos, tablets, etc.

En pocas palabras, gracias al Cloud Computing disponemos de una manera fácil de acceder a servidores, almacenamiento, bases de datos y un conjunto completo de servicios de aplicaciones desde cualquier dispositivo conectado a Internet en cualquier parte del mundo.

En la computación en la nube, cuando se habla de nube, en la mayoría de los casos nos referimos a la "nube pública", en la que, a diferencia de la "nube privada", los datos no se almacenan en los servidores de la propia empresa. De modo que, se alquilan infraestructuras de TI que están equipadas con memoria y potencia de procesador, según el tamaño de tus necesidades, o que ya ofrecen soluciones de software apropiadas.

La composición individual de los recursos y el software, en particular, puede reducir los costos de personal y los costos para la adquisición de infraestructuras de TI propias, así como los costos para su mantenimiento.

Cloud Computing se ha transformado en el modelo de negocio, tanto de pymes como de grandes empresas, debido a la disponibilidad de alta potencia, bajo coste, confiabilidad, escalabilidad, accesibilidad y productividad.

De acuerdo con investigaciones recientes, se dice que hay aproximadamente 1024 petabytes de datos en la computación en la nube o, lo que es lo mismo, 1,07,30,741,824 GB.

¿De qué temas se habla?
  1. ¿Cómo funciona el Cloud Computing?
    1. Infraestructura como servicio (IaaS)
    2. Plataforma como servicio (PaaS)
    3. Software como servicio (SaaS)
  2. Pros y contras del Cloud Computing

¿Cómo funciona el Cloud Computing?

Para comprender cómo funciona la computación en la nube, es fundamental que conozcas los diferentes tipos que lo componen. Se puede hacer una distinción usando la arquitectura de computación en la nube, que consta de tres capas: la capa de infraestructura, la capa de la plataforma y la capa de la aplicación.

Infraestructura como servicio (IaaS)

La infraestructura como servicio es la capa más baja en la computación en la nube. IaaS describe un modelo comercial en el que no se ofrece una solución completa (aplicación de hardware y software), sino solamente el hardware requerido para implementar aplicaciones específicas. Esto se encuentra en los centros de datos. Los usuarios de este tipo de nube tienen acceso a componentes virtualizados para el procesamiento, transporte y almacenamiento de datos, lo que les permite implementar e instalar cualquier aplicación y sistema operativo.

Amazon Web Services (AWS) fue el primer proveedor de IaaS y es actualmente el líder del mercado, seguido por Microsoft Azure, Google Cloud Platform e IBM Cloud.

Plataforma como servicio (PaaS)

La plataforma representa la capa intermedia. PaaS es un servicio que permite a los desarrolladores desarrollar y ejecutar sus propios programas en la infraestructura ofrecida por medio de interfaces. Para este propósito, el proveedor PaaS proporciona entornos de desarrollo en forma de framework.

Sin embargo, el desarrollador no tiene la capacidad de acceder a la infraestructura utilizada para proporcionar el servicio, ya sea administrativa o de manera controlada. Sólo puede controlar los programas y los datos que ha contribuido él mismo.

Software como servicio (SaaS)

Las aplicaciones representan la última capa y se construyen lógicamente en todas las capas anteriores. SaaS es un modelo comercial en el que la aplicación ya no se vende al cliente, sino que se proporciona como un servicio por una tarifa. Como resultado, el software y la infraestructura de TI son operados por un proveedor de servicios externo. Para ejecutar el software, en la mayoría de los casos, sólo se requiere un dispositivo con conexión a Internet y un navegador. Esto permite que el hardware que se utilice en la empresa sea rentable y al mismo tiempo se beneficie de la potencia de cómputo y la capacidad de almacenamiento de un centro de datos.

En pocas palabras, el software no tiene licencia ni está instalado en tu propio hardware, sino que se "alquila" y puede ser utilizado en cualquier lugar con cualquier navegador de Internet.

Los SaaS más populares en el sector empresarial son, por ejemplo, GSuite de Google y Microsoft Office 365. Entre las aplicaciones corporativas Salesforce es el líder del mercado.

Pros y contras del Cloud Computing

Cada una de las clases explicadas anteriormente ofrece ventajas y desventajas.

La mayor ventaja es, probablemente, que las empresas más pequeñas no tienen que invertir mucho en infraestructuras de TI muy costosas, sino que pueden adherirse directamente a las soluciones ya establecidas. La gran cantidad de aplicaciones en la nube también permite responder de manera flexible a los nuevos procesos y oportunidades comerciales. Por último, la mayoría de las soluciones de SaaS se pueden probar de forma gratuita o incluso están disponibles permanentemente en una versión gratuita.

Por supuesto, también hay desventajas. Especialmente desde el punto de vista de protección de datos, las aplicaciones en la nube deben usarse con precaución. Debido al hecho de que los datos no se almacenan en un centro de datos o servidor local propio de la compañía, sino en un centro de datos al que no se tiene acceso directo, éstos están particularmente en peligro.

Por lo tanto, se deben realizar demandas especiales sobre la seguridad de los proveedores de servicios en la nube y, además, acuerdos independientes por separado para el procesamientos de datos de pedidos.  Afortunadamente, esta desventaja no se aplica a todos los proveedores de SaaS, pues muchas empresas como Stackfield.com, ya no sólo cifran los datos relevantes en el navegador, sino que también los almacena de forma cifrada en los servidores. Este nivel de seguridad no se puede reproducir por una solución interna.

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Alex Monrás

Fundador y CEO de DominioGeek. Siguiendo sin interrupción los últimos acontecimientos tecnológicos. Tengo 15 años de experiencia creando contenido en la red sobre tecnología, informática e Internet.

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    1 Comentarios

  1. DeXon dice:

    Muy interesante el articulo!! Sigue así.

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